Google ha dado un nuevo paso en el desarrollo de inteligencia artificial avanzada con el lanzamiento de Deep Think, una versión mejorada de su modelo Gemini 2.5. Esta nueva tecnología, orientada al razonamiento complejo, está disponible exclusivamente para los suscriptores del nivel más alto de su servicio AI Ultra, que tiene un coste mensual de 250 dólares.
¿Qué es Deep Think y qué lo hace especial?
Deep Think es un modelo de inteligencia artificial centrado en el razonamiento profundo y la resolución de problemas complejos. Inspirado en los métodos que usan los humanos para pensar en paralelo, este sistema puede generar múltiples ideas simultáneamente, evaluarlas y combinarlas para ofrecer una respuesta más precisa y completa.
Una de las características más destacadas de Deep Think es su capacidad multimodal, lo que significa que no solo procesa texto, sino también puede interpretar imágenes y sonido, permitiendo una comprensión más rica del contexto y de las tareas que se le plantean.
Un rendimiento digno de olimpiadas matemáticas
Según Google, Deep Think es una versión pública de un modelo que alcanzó resultados de nivel medalla de oro en la Olimpiada Matemática Internacional, aunque el modelo ahora lanzado estaría en un estándar de medalla de bronce. Esto no significa que haya perdido capacidad, sino que ha sido ajustado para un uso cotidiano, con mayor rapidez y eficiencia.
Mientras tanto, el modelo original, más potente, se mantiene en manos de un grupo reducido de investigadores y matemáticos, quienes seguirán probándolo en entornos de investigación.
Comparativas con otros modelos
En pruebas internas, Deep Think ha sido evaluado con benchmarks como Humanity’s Last Exam y LiveCodeBench, donde superó a modelos reconocidos como OpenAI’s o3, xAI’s Grok 4 y Gemini 2.5 Pro, dejando claro que Google está empujando los límites del rendimiento de la IA.
Este tipo de evaluaciones sirven como referencia objetiva del desempeño en tareas de lenguaje, código, matemáticas y lógica. Google ha decidido no publicar todavía los resultados detallados, pero las afirmaciones ya apuntan a un salto cualitativo importante.
Acceso limitado y precio elevado
Por el momento, solo los usuarios del plan AI Ultra pueden utilizar Deep Think desde la aplicación de Gemini. Este plan no solo es el más caro de los que ofrece Google, sino que también impone ciertas limitaciones en el número de solicitudes diarias que se pueden hacer al modelo, aunque Google no ha especificado cuántas exactamente.
Este enfoque de acceso restringido puede entenderse como una fase de prueba pública controlada, permitiendo a Google recopilar datos reales de uso sin saturar su infraestructura ni comprometer la calidad del servicio.
Pensamiento paralelo: una forma distinta de razonar
El llamado «pensamiento en paralelo» es uno de los pilares de Deep Think. En lugar de seguir un único camino lógico hacia la respuesta, este modelo considera múltiples posibilidades al mismo tiempo, algo parecido a tener varios expertos opinando al mismo tiempo sobre una misma pregunta.
Esto puede compararse con lo que ocurre cuando planeamos un viaje: no pensamos sólo en el destino, sino también en las rutas, el clima, el transporte, el presupuesto y las fechas. Al evaluar todas esas variables juntas, tomamos una decisión informada. Deep Think hace algo similar, pero con velocidad y escala propias de una IA.
Implicaciones para el futuro del trabajo y la educación
La llegada de modelos como Deep Think marca un punto de inflexión en cómo podrían evolucionar herramientas profesionales y educativas. Al ser capaz de resolver problemas de alta complejidad, esta IA podría usarse en entornos como:
- Educación avanzada, ofreciendo tutorías personalizadas de matemáticas o ciencia.
- Investigación académica, facilitando el análisis de datos complejos.
- Programación y desarrollo de software, ayudando con código a nivel profesional.
Sin embargo, su coste actual lo aleja del gran público, manteniéndolo como una herramienta para expertos, empresas o instituciones con presupuestos generosos.
El equilibrio entre potencia y accesibilidad
Google parece estar explorando una estrategia mixta: ofrecer modelos muy potentes a un segmento premium, mientras mantiene versiones más accesibles y generales para el resto del público. Este enfoque recuerda a lo que sucede en el mundo automotriz: hay coches de alta gama con tecnología de punta y otros modelos populares que heredan parte de esas innovaciones más adelante.
Queda por ver cuándo y cómo Google podrá integrar las capacidades de Deep Think en versiones gratuitas o de menor coste. Por ahora, quienes lo han probado parecen coincidir en que marca un nuevo estándar de lo que una IA puede hacer con problemas que antes solo los humanos podían resolver con eficacia.