Después de años de pequeños ajustes en cámaras, pantallas y potencia, los fabricantes de smartphones parecen estar buscando una nueva fórmula para volver a entusiasmar a los usuarios. Uno de los más audaces en esta tarea es Samsung, que está preparando el lanzamiento de un smartphone tri-plegable, una apuesta que podría llegar este mismo año a Estados Unidos, algo que marcaría un hito para el mercado occidental.

Aunque Samsung ya ha experimentado con móviles plegables desde 2019, el nuevo modelo tri-plegable promete ser un salto importante, tanto en formato como en funcionalidades. No se trata solo de un cambio estético: estamos hablando de una pantalla que se pliega en tres partes, como un folleto o incluso como una «S», dependiendo del diseño final.

De Corea al mundo: una expansión calculada

Hasta ahora, los dispositivos más experimentales de Samsung han sido lanzados de forma limitada en mercados como Corea del Sur y China. El Galaxy Z Fold 6 SE, por ejemplo, nunca salió oficialmente de Asia. Pero con el tri-plegable, la compañía está evaluando seriamente su llegada a Estados Unidos, una señal clara de que ve en este nuevo formato una oportunidad más global.

Esta decisión cobra aún más peso si se considera que Huawei, que ya ofrece teléfonos tri-plegables, no comercializa sus dispositivos en suelo estadounidense. Samsung podría ser la primera en introducir oficialmente este tipo de tecnología en un mercado que sigue dominado por los smartphones planos tradicionales.

La presión de un mercado que ya no se conforma

Las grandes marcas, como Samsung y Apple, enfrentan un entorno en el que los consumidores cambian de dispositivo con menos frecuencia. Los smartphones se han convertido en herramientas tan eficientes que la necesidad de renovación constante ha disminuido. De ahí que los fabricantes deban innovar no solo para diferenciarse, sino también para justificar el precio de sus nuevos modelos.

Apple, por su parte, acaba de presentar el iPhone Air, su primer rediseño importante en casi una década, y se rumorea que planea su propio teléfono plegable para 2026. Este contexto hace que Samsung quiera adelantarse con una propuesta lo suficientemente disruptiva como para captar la atención antes de que el mercado vuelva a polarizarse entre dos gigantes.

Qué se sabe del dispositivo tri-plegable

Aunque la compañía surcoreana aún no ha revelado detalles técnicos definitivos, ejecutivos de la empresa han confirmado que el dispositivo está previsto para lanzarse en 2025. La pantalla superará en tamaño a la del actual Galaxy Z Fold 7, que alcanza las ocho pulgadas una vez desplegado, colocándose así entre un smartphone y una tablet pequeña.

Samsung ha presentado distintos conceptos en ferias como el CES de Las Vegas, entre ellos el Flex G (que se pliega como un tríptico) y el Flex S (que imita la forma de esa letra, alternando pliegues hacia dentro y fuera). Aunque ninguno de estos prototipos ha llegado al mercado, sirven de antesala para entender la dirección del nuevo diseño.

Según Drew Blackard, vicepresidente senior de gestión de producto móvil en Samsung Electronics America, la idea no es replicar lo ya conocido, sino ofrecer una experiencia diferente. El objetivo es que el formato permita usos nuevos, más allá de una simple pantalla más grande.

Más pantalla, más posibilidades

El atractivo de un teléfono tri-plegable radica en su versatilidad. En un mundo donde consumimos más contenido visual, trabajamos desde el móvil y utilizamos apps multitarea, tener una pantalla que puede expandirse a voluntad resulta muy tentador. Imagina poder revisar documentos, hacer videollamadas y tomar notas al mismo tiempo, sin necesidad de cambiar de dispositivo o limitarte al tamaño reducido de una pantalla tradicional.

Blackard destaca que los modelos plegables actuales atraen al doble de usuarios que no eran clientes de Samsung respecto a los modelos tradicionales. Esto refuerza la idea de que hay un segmento dispuesto a pagar más por una experiencia diferencial.

Un lujo que aún busca su lugar

Pese al entusiasmo, los móviles plegables siguen siendo un nicho. Según datos de IDC, se espera que en 2028 se vendan 45,7 millones de unidades de este tipo, en un mercado donde los envíos totales de smartphones superan los 1.200 millones. El precio elevado, junto con ciertas dudas sobre durabilidad, ha limitado su adopción masiva.

El Galaxy Z Fold 7, por ejemplo, tiene un precio cercano a los 2.000 dólares. No es un móvil para cualquiera, pero sí una herramienta potente para quienes buscan productividad, diseño premium y exclusividad. El tri-plegable probablemente se moverá en esa misma línea, al menos en sus primeras versiones.

¿Más delgado o sin puertos? El debate del diseño

Otro frente de innovación está en el diseño ultradelgado. Samsung planea lanzar una versión aún más fina del Galaxy S Edge el próximo año, dentro de la familia Galaxy S26. Este énfasis en la delgadez ha reavivado la especulación sobre smartphones sin puertos de carga, una idea que Apple también habría considerado para su iPhone Air, según Bloomberg.

Aunque técnicamente es viable, Samsung no parece convencida aún. La carga inalámbrica no está lo suficientemente extendida como para reemplazar por completo el cable, especialmente en contextos de emergencia o movilidad. Como explica Blackard, eliminar el puerto solo tiene sentido si el beneficio es claro para el usuario, algo que por ahora no ocurre.

La compañía también ha evaluado ideas más radicales, como un teléfono con pantalla completamente transparente. Pero de nuevo, las limitaciones técnicas, como dónde colocar la batería, hacen que estas propuestas se queden en concepto.

¿Volver al futuro? Formatos que rompen la monotonía

Lo interesante de esta nueva etapa en la industria es que los teléfonos están dejando de parecer todos iguales. Así como en los años 2000 coexistían sliders, conchas, barras y otros formatos, hoy vuelve a haber diversidad. Y esa variedad es una buena noticia para el usuario, que puede elegir según su estilo de vida, y no solo según la potencia del procesador o los megapíxeles de la cámara.

Samsung parece apostar por una idea sencilla pero poderosa: si vamos a usar el móvil como un centro de trabajo, entretenimiento y comunicación, entonces su forma debe adaptarse a nosotros, y no al revés.

Samsung apuesta por los smartphones tri-plegables para redefinir el futuro móvil

Después de años de pequeños ajustes en cámaras, pantallas y potencia, los fabricantes de smartphones parecen estar buscando una nueva fórmula para volver a entusiasmar a los usuarios. Uno de los más audaces en esta tarea es Samsung, que está preparando el lanzamiento de un smartphone tri-plegable, una apuesta que podría llegar este mismo año a Estados Unidos, algo que marcaría un hito para el mercado occidental.